Seguramente en más de una ocasión hayas estado a punto de tirarte por la ventana 🙂
Los días pasan y las tareas se acumulan, y encima, no te ha dado tiempo a lo más importante, ocuparte de ti…
¿Cómo organizar un día, en el que por mucho que lo intentes, necesitas mínimo 4 horas más?
Hay mucha información por ahí que te habla de «planificación previa y cumplir objetivos», de «no dejar para mañana lo que puedas hacer hoy», etc..
Pero eso sólo ha conseguido crearte un poquito más de ansiedad y desazón porque no consigues organizarte ni queriendo 😉 .
¿Cómo organizar mi tiempo cuando le faltan horas al día?
Si trabajas fuera de casa necesitas más horas, si trabajas desde casa necesitas más horas….
¡¿Entonces?! Bueno, no nos alarmemos vayamos por partes.
Si ya has seguido todos los consejos que has encontrado por la red y jamás te han funcionado porque no has durado ni dos semanas, escúchame bien.
Las horas no son el problema.
Así que, os pongo a ambos en situación y pensemos en cómo organizar un día cualquiera.
Mantén una Visión Panorámica del día sin Quejas.
Tienes que ser capaz de visualizar el conjunto de tareas u obligaciones que cumplir.
Pero eso no significa que las tengas que pensar todas a la vez y «aturullarte» con esos pensamientos. Este suele ser uno de los principales agobios (nos lo creamos nosotros mismos).
Ejemplo: Habrás visto mil veces dos personas que se cruzan a primera hora del día (quizás seas tu una de ellas) y esta es la conversación que se traen:
– ¡Siempre vamos corriendo! Nada, que yo voy para el trabajo..qué tengo un día de locos, bajo a hacer un recado rápido, subirlo a casa, ir a recoger tal cosa y empezar otra vez con la tarea diaria…
– ¡Qué me vas a contar a mi, que menudo día llevo! Y eso que hoy me he levantado antes y ¡¿qué consigo si me está cundiendo menos?! y lo peor es que aún me queda…
Esto no ayuda para nada: quejarse del poco tiempo que tienen, perdiéndolo.
¿Cómo no se nos va a dar mal el día con esta actitud? ¿Qué es esto, a ver quién tiene menos tiempo? No entiendo 🙁 .
La Vorágine cuando hay niños: Disfruta.
Esto es algo que a menudo se utiliza de excusa para decir «es que no me da tiempo a nada».
En mi caso, como no soy madre, me encuentro a veces con este tipo de respuestas tajantes.
Sobre todo ellas, concluyen que a mi me da tiempo a todo porque no tengo hijos. Yo discrepo, pero están en su derecho de vivir con ese pensamiento.
El mío, es bien distinto. Y no digo que sea fácil.
Sólo pienso que la clave está en educar a los hijos a que disfruten con sus tareas mientras ven que tu también lo haces con las tuyas.
Conozco padres y madres que se organizan muy bien el día a día, y además lo disfrutan intesamente. Es cuestión de actitud.
Si te muestras asquead@ con lo que estás haciendo, ellos también lo harán y no te dejarán sacarle partido a tus horas, si es lo que necesitas.
Organiza tu interior.
Está claro que una cosa es una jornada laboral fuera de casa y otra distinta cuando trabajas en ella.
Pero hay algo que mujeres y hombres, dentro y fuera de casa, sienten por igual.
Esa sensación de no tener tiempo para nada y estar hartos de la rutina del día a día.
La pregunta es: ¿eres feliz con lo que haces? ¿ese trabajo o dedicación te hace sonreir día a día?
¡Eso es lo que importa! Tu fíjate en alquien a quien admires, que seguro que le verás «fluir» en su día a día sin prisa pero sin pausa y disfrutando de todo lo que hace 🙂 .
Puede que sea el momento de replantearte este tipo de cosas, de buscar alicientes en la vida para que esta sea más placentera y menos dominada por el factor tiempo.
Elimina la prisa, es tu peor enemiga.
«No me va a dar tiempo, no llego»…
Deja de mandar a tu cerebro este tipo de mensajes porque las horas pasarán más rápido.
En lugar de estar centrado y disfrutando de lo que estás haciendo, andas pensando en lo que No estás haciendo.
Quita de tu vida lo superfluo, elimina aquello que no te aporte o estimule .
La televisión por ejemplo, o las compañías indeseables, quitan tiempo a muchas personas al cabo del día.
A veces es cuestión de madrugar más, a veces de aprovechar la noche para hacer lo que no te ha dado tiempo. Pero correr por sistema desgasta muchísimo créeme.
La Moraleja de este post podría ser: Disfuta de tu tiempo, no te quejes tanto y organiza sólo lo imprescindible…
Después de que pienses en todas estas cosas, seguro que querrás «organizar tu tiempo» de otra manera. Seguro que dentro de ti hay una persona más espontánea y menos quejica deseando salir 😉 .
Si has llegado a leer hasta este punto, quizás es que pienses que algo de razón llevo 😛 me encantaría leer tu opinión abajo en los comentarios.
¡Y por supuesto que lo compartieras con tu gente si te ha ayudado!
Escritora, Redactora Digital y Consultora Literaria. Me encantará compartir contigo mis experiencias como autora y emprendedora online. Facebook